martes, 23 de octubre de 2012

Laboratorio de química

Jerry Lewis y Stella Stevens en "El profesor chiflado" (1963)

He pasado por aquí y me han dado ganas de quedarme a escribir sobre ti. Elegir, una a una, las palabras, medirlas y pesarlas cuidadosamente para someterlas al proceso que destile el líquido inestable de nuestro amor. Un compuesto de naturaleza volátil que es necesario preservar, encerrarlo en un frasco y mirarlo a través del cristal para evitar que se evapore al contacto con el aire.

2 comentarios:

  1. ¿De verdad las palabras de amor requieren de todo ese proceso científico??? ¿no salen a borbotones????

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  2. A pesar del largo tiempo de silencio veo, Julio, que acudes puntual con tus cuestiones sobre lo que aquí se dice. Como siempre, gracias.
    Si intervienen las emociones, si podemos hablar de efervescencia y borbotones, pero si intervienen las palabras, éstas nos llevan a otro plano. El discurso es alambicado, las palabras, como las moléculas, se juntan unas con otras buscando el significado.

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